Para los que no conozcais este maravilloso encuentro de titiriteros será un agradable descubrimiento. Echad un vistazo a este video.
BIME 2009 BIENAL INTERNACIONAL DE LA MARIONETA DE EVORA from simón Fariza on Vimeo.
lunes, 28 de febrero de 2011
jueves, 24 de febrero de 2011
miércoles, 23 de febrero de 2011
Francisco Peralta es el maestro de los marionetistas españoles. Así lo reconoce el gremio de titiriteros, que le debe la precisión en los movimientos, la paciencia del ingeniero mecánico, la pasión por las marionetas y la ética del artista.
Esperemos que en esta edición también podamos disfrutar de la presencia de nuestros amigos valencianos(con alguna ascendencia extremeña jejeje) del CIRCO MALVARROSA (TEATRO lA ESTRELLA)
FRANCISCO PERALTA. Historia de los títeres from simón Fariza on Vimeo.
Esperemos que en esta edición también podamos disfrutar de la presencia de nuestros amigos valencianos(con alguna ascendencia extremeña jejeje) del CIRCO MALVARROSA (TEATRO lA ESTRELLA)
CIRCO MALVARROSA (Teatro de marionetas la Estrella) from simón Fariza on Vimeo.
LA ESTRELLA EN ÁFRICA from simón Fariza on Vimeo.
martes, 15 de febrero de 2011
Y otra maravilla más de teatro inspirado en el BUNRAKU japonés
Para más información http://es.wikipedia.org/wiki/Bunraku
Kaguyahime die Mondprinzessin - Welt-Kindertheater-Fest 2010 from Welt-Kindertheater-Fest Lingen on Vimeo.
Para más información http://es.wikipedia.org/wiki/Bunraku
Basada en un texto de MICHAEL ENDE
Ophelia's Shadow Theater - Welt-Kindertheater-Fest 2010 from Welt-Kindertheater-Fest Lingen on Vimeo.
viernes, 11 de febrero de 2011
Textos teatrales para chicos en la red
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Teatro en la Biblioteca Imaginaria. Repertorio de obras breves. Obras de teatro infantil. Antología de obras teatrales para chicos que, en algunos casos, retoman cuentos tradicionales. Teatro infantil en “Leeme un cuento”. El sitio de literatura infantil “Leeme un cuento” brinda, en esta página, obras de teatro breve. Extraido de Guía de Letras (Educared) | |
Aunque no hay muchos sitios en Internet que publiquen textos de teatro para chicos, en estas páginas se pueden encontrar obras breves de buena calidad literaria.
En LA REBELIÓN DE LOS NÚMEROS se produce una ecuación explosiva: ¡¡Matemáticas y Teatro!!
Un texto original e insólito, tanto en la escuela como sobre un escenario escrito por Antonio de la Fuente Arjona
Las ilustraciones son de Juan Manuel García Álvarez.
Editorial: Ediciones de la Torre www.edicionesdelatorre.com
lunes, 7 de febrero de 2011
Construye un teatrito de marionetas con una caja de leche.
Y también puedes construir un teatro de sombras. Pincha en este enlace.
Y para ver teatrillos más sofisticados aquí tienes este video.
miércoles, 2 de febrero de 2011
TITIRITEROS por Elvira Lindo
No sé cómo se sentirán los titiriteros al comprobar que el nombre que denomina su oficio ha adquirido matices de insulto. Titiritero es la forma chusca de rebajar la categoría de los actores españoles. Lo veo aquí y allá. Cada vez que un comediante expresa una opinión política el clamor de antipatía que despierta se resume en un nombre pronunciado con enorme desprecio: titiritero.
Hay que ser muy ignorante para ensuciar la nobleza de ese oficio. Tal vez aquellos que vivan ajenos por completo al universo de la imaginación infantil no sepan calibrar lo que para un niño significa un espectáculo de títeres. Desde el teatrillo callejero más modesto al que llega al Teatro Real, como las espectaculares marionetas de Enrique Lanz representando El Retablo de Maese Pedro, de Manuel de Falla, todos tienen su valor. Uno de los espectáculos españoles más reseñados en Nueva York el año pasado fue el de las marionetas del grupo aragonés Caleidoscopio. Yo asistí aquel sábado mágico de oscuridad y muñecos fluorescentes y compartí la emoción de unas criaturas a las que los titiriteros hicieron soñar con esa cualidad de lenguaje universal que posee el títere. Recuerdo a los titiriteros al final de la función: vestidos con mallas negras para hacerse invisibles, sudorosos, felices por haber llenado un gran teatro y haber demostrado la magia sin fronteras de su oficio.
Pero hay más. No entiendo qué ha pasado en este país para que, recién salidos de una dictadura, en los setenta, se respetara a los cómicos aunque gran mayoría de ellos se declararan de izquierdas, y ahora seamos incapaces. ¿Éramos más tolerantes? ¿Entendíamos entonces que no es necesario coincidir políticamente con alguien para apreciar su trabajo? Los medios que fomentan ese desprecio alientan un espíritu antidemocrático, aunque se les llene la boca con la palabra concordia.
el pais 24/02/2010
No sé cómo se sentirán los titiriteros al comprobar que el nombre que denomina su oficio ha adquirido matices de insulto. Titiritero es la forma chusca de rebajar la categoría de los actores españoles. Lo veo aquí y allá. Cada vez que un comediante expresa una opinión política el clamor de antipatía que despierta se resume en un nombre pronunciado con enorme desprecio: titiritero.
Hay que ser muy ignorante para ensuciar la nobleza de ese oficio. Tal vez aquellos que vivan ajenos por completo al universo de la imaginación infantil no sepan calibrar lo que para un niño significa un espectáculo de títeres. Desde el teatrillo callejero más modesto al que llega al Teatro Real, como las espectaculares marionetas de Enrique Lanz representando El Retablo de Maese Pedro, de Manuel de Falla, todos tienen su valor. Uno de los espectáculos españoles más reseñados en Nueva York el año pasado fue el de las marionetas del grupo aragonés Caleidoscopio. Yo asistí aquel sábado mágico de oscuridad y muñecos fluorescentes y compartí la emoción de unas criaturas a las que los titiriteros hicieron soñar con esa cualidad de lenguaje universal que posee el títere. Recuerdo a los titiriteros al final de la función: vestidos con mallas negras para hacerse invisibles, sudorosos, felices por haber llenado un gran teatro y haber demostrado la magia sin fronteras de su oficio.
Pero hay más. No entiendo qué ha pasado en este país para que, recién salidos de una dictadura, en los setenta, se respetara a los cómicos aunque gran mayoría de ellos se declararan de izquierdas, y ahora seamos incapaces. ¿Éramos más tolerantes? ¿Entendíamos entonces que no es necesario coincidir políticamente con alguien para apreciar su trabajo? Los medios que fomentan ese desprecio alientan un espíritu antidemocrático, aunque se les llene la boca con la palabra concordia.
el pais 24/02/2010
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